La marca del óvalo presentó en Detroit a la séptima generación del legendario “Pony Car”.
Ademas de los cambios estéticos, evolucionó a sus motores EcoBoost (4 cilindros, 2.3) y al Coyote V8 de 5 litros que incorpora el Mustang GT. Transmisión manual de 6 marchas o automática de 10.
Cuenta con 6 modos de conducción y se ofrece un “Pack Performance” que suma un diferencial de deslizamiento limitado Torsen, suspensión activa MagneRide, frenos Brembo de mayor tamaño, escape activo y butacas Recaro. Además debuta un freno electrónico para facilitar maniobras de drift.
Equipamiento principal: Ford Co-Pilot360, -que agrupa a las asistencias para la conducción, instrumental digital de 12.4″, sistema multimedia SYNC 4 (Apple CarPlay/Android Auto) con pantalla de 13.2″, asistente Alexa de Amazon y alta fidelidad B&O, entre otros elementos.
La comercialización en los Estados Unidos se iniciará a mediados de 2023 y la producción seguirá realizándose en la planta de Flat Rock, Michigan.
Pero quizás la novedad mas importante es la incorporación de un nuevo integrante a la familia Mustang: el Dark Horse, con 500 HP, que posibilitará las versiones Dark Horse S y Dark Horse R, primeras de una serie de 6, destinadas a la competición.