A las 13:30hs del 14 de abril de 1929, se disputó -sobre 100 vueltas- el primer Gran Prix de Monaco que, con Bugatti 35B, ganó el piloto “Williams”. En ese momento comenzó la carrera que marcó el nacimiento de un estilo particular que se mantiene hasta hoy.
Nunca fue un circuito. Siempre se conservó como una tradición del automovilismo más distinguido porque Monaco es un Principado con características particulares que trata arduamente de mantener, con su topografía semi hollywoodense y un hermoso puerto que alberga cientos de embarcaciones de gran lujo. Un lugar que infunde respeto por lo que significa a través de los años, por la presencia de la familia Rainiero, incluida Grace Kelly, y el entusiasmo del Principe por los autos (Fangio le montó un tallercito en su casa).
El Grand Prix fue, como casi siempre, aburrido. Ahora acrecentado porque el reglamento es el peor de las últimos tiempos. Por el dominio de los dos Mercedes-Benz sobre todo el resto y la cantidad de gente que está estudiando para recibirse de piloto. Vamos a transcribir algunas situaciones aisladas:
Dominio exagerado de los Mercedes, escapados adelante y sin remedio para nadie. A poco del comienzo chocan Pérez y Button con la entrada del safety-car. Abandona Vettel. Le avisan a Hamllton que no se ponga cerca de Rosberg para tener aire limpio. Rosberg avisa que está mal de los neumáticos traseros. Entra otra vez el safety-car. Desde su box le piden a Hamilton que no se queje más (habia pedido parar antes para cambiar los neumaticos y chilla porque no lo autorizaron). Monaco está nublado, no se ve el público por ningún lado y los Mercedes están solos y muy adelante de todos. Por la pantalla de TV muestran la planilla con el consumo de combustible… Pasa algo: Bottas rompe el motor Mercedes-Benz, con explosión y humo. Gutiérrez va solo por el medio de la calle y hace un trompo perfecto. Ni ponen banderas amarillas, lo levantan con la grua porque no había ningún auto cerca. Alonso está a 22 segundos de los punteros. Comienza el show. Pasa Rosberg solo…¿y Hamilton?. No aparece. Movimientos en el box alemán. Todos se alteran. Grita Hamilton: ”Tengo molestias en el ojo izquierdo…No veo nada. Es como si tuviera tierra”. ¿Y el casco?).
Se va lejos y solo Rosberg mientras Hamilton deja acercar a Ricciardo. Empiezan las especulaciones. Llega, no llega, ¿lo alcanza?. Mientras Kimi le pega a Magnussen porque està aburrido. Ricciardo se pone a tiro. Hamilton no se va, pero tampoco se queda. Falta una vuelta y Ricciardo es el único que corre en serio. Hamilton se cansa, se olvida del ojo y todo se normaliza.
Rosberg saluda a sus mecánicos con euforia y Hamilton se acerca a otro grupito a 10 metros de distancia. Serio, ni se acercò a su compañero de equipo y ni le dio un apretón de manos. Todo frio y calculado. Como en la guerra. El único serio y con pudor fue, una vez màs, Ricciardo. Sonriente por su nuevo podio y, seguramente, sin tener en cuenta a los que jugaron adelante de èl y lo hicieron entusiasmar con un posible segundo puesto. Esto es lo màs moderno que puede ofrecer la categoría.
Campeonato de Conductores:
1 – Nico Rosberg: 122 puntos
2 – Lewis Hamilton: 118 puntos
3 – Fernando Alonso: 61 puntos
4 – Daniel Ricciardo: 54 puntos
Campeonato de Constructores:
1 – Mercedes: 240 puntos
2 – Red Bull Racing-Renault: 99 puntos
3 – Ferrari: 78 puntos
Próxima competencia: GP de Canada, el 8 de junio