El Ford Focus es uno de los modelos más exitosos en el mundo. Varios son los motivos. Uno de ellos, el poner al alcance, tecnologías presentes en vehículos de segmentos superiores. A solo dos años de la presentación de la tercera generación, llegó una renovación estética y de equipamiento, que probamos durante una semana, para contártelo todo en este informe.
El Nuevo Ford Focus es fácilmente distinguible y más atractivo. En su frontal adopta una parrilla de forma hexagonal, al estilo del Fiesta y del Mondeo. Las ópticas son más delgadas y los antiniebla flanquean a una entrada de aire inferior. Los cambios en la trompa se completan con nervaduras en el capot que convergen sobre el óvalo, en su nueva ubicación. La vista lateral destaca a las llantas de aleación con nuevo diseño y en el sector trasero el paragolpes, la tapa del baúl y las ópticas renovadas (en el hatchback, más chicas).
El Nuevo Focus mantiene el habitáculo moderno del modelo anterior, con algunas reformas. Entre ellas el volante, que ahora es de tres rayos, una pantalla multimedia más grande y un portaobjetos en la zona inferior de la consola central. La óptima distribución de comandos, todos al alcance del conductor, y la butaca con ajustes eléctricos permite una excelente posición de manejo. El instrumental, con cuadrantes analógicos, agujas celestes y display central no tiene cambios, entregando un muy buen nivel de información.
Las dimensiones del nuevo modelo son las mismas que las del anterior, por lo que sigue como punto a mejorar la habitabilidad de las plazas traseras. El volumen del baúl en la versión sedan es de 421 litros (316 en el hatchback). La rueda de auxilio es temporal.
En este nuevo Focus se mantiene la mecánica (naftera, aspirada) del modelo anterior. Es decir, que la versión de entrada a la gama incorpora al Sigma de 1.6 litros con 125 CV y para el resto se ofrece al Duratec de 4 cilindros, 16 válvulas, de 2 litros y 170 CV.
La transmisión puede ser manual de 5 velocidades, a la que se agrega en las dos versiones superiores la automática Powershift de 6, que ahora ofrece levas en el volante.
El Focus Titanium Powershift que probamos, acelera de 0 a 100 km/h en 9 segundos y alcanza los 215 km/h. El consumo en ciclo mixto es de aproximadamente, 9 litros/100 km.
El comportamiento dinámico del Ford Focus siempre fue ejemplar, y en este nuevo modelo se mantiene la tradición, con suspensión trasera independiente y el control de torque en curva que actúa sobre las ruedas delanteras, reduciendo el subviraje y mejorando la maniobrabilidad.
La seguridad es otro punto en el que el Nuevo Focus se destaca. Esta generación obtuvo las máximas calificaciones de los organismos internacionales como el IIHS, NHTSA, EuroNCAP y LatinNCAP. Incorpora elementos conocidos como el control electrónico de estabilidad, de tracción, asistente para el arranque en pendientes, ABS, monitoreo de la presión de los neumáticos, anc;lajes ISOFIX y 6 airbags. Pero eso no es todo, ya que cuenta con el Active City Stop: un sistema que si el vehículo que va por delante se detiene imprevistamente, aplica los frenos en forma automática sin intervención del conductor, para reducir las consecuencias de un impacto o incluso prevenirlo totalmente (funciona hasta velocidades de 50 km/h).
La gama del Nuevo Ford Focus está compuesta por 4 niveles de equipamiento: S, SE, SE Plus y Titanium.
Cuando probamos el modelo anterior comentamos que era difícil encontrara algún elemento de confort para agregar. Sin embargo, hay novedades. El sistema de estacionamiento asistido que facilita la maniobra al encargarse del giro del volante que ya estaba presente en el anterior Focus, ahora funciona en forma paralela, perpendicular e incluso para salir de su posición.
Otros elementos destacados incluyen a la dirección asistida eléctricamente, al climatizador automático bizona, al sonido de alta fidelidad Sony con 9 parlantes, al sistema multimedia SYNC My Ford Touch con pantalla táctil de 8 pulgadas, control por voz que permite acceder a 10.000 comandos, apertura y cierre sin llave, botón de encendido, el sistema MyKey que adapta el funcionamiento del vehículo para distintos usuarios, sensores de estacionamiento con cámara para el retroceso, teecho solar eléctrico, luces diurnas de tipo LED, además de los faros bi-xenón direccionales y adaptativos, que se adecuan a las distintas circunstancias: curvas, vías secundarias, autopistas y varias más.
Se ofrecen 9 colores de carrocería, varios diseños de llantas y una amplia línea de accesorios. El Nuevo Focus es una de las dos plataformas globales que Ford Argentina produce en la planta de General Pacheco, para el mercado local y de exportación. La garantía es de 3 años o 100.000 kilómetros, transferible.
El nivel de equipamiento tanto de confort como de seguridad y su desempeño dinámico, explica porque el Ford Focus se posicionó como uno de los modelos más exitosos en el mundo.