En un lluvioso mediodía, tomamos contacto con el nuevo Audi A3 en el Autódromo de Buenos Aires.

Se trata de la tercera generación de un modelo que le dio grandes satisfacciones a la marca de los cuatro anillos. Estéticamente las diferencias se aprecian principalmente en las nuevas ópticas con borde inferior en forma de onda y la parrilla singleframe con esquinas oblicuas. Los faros traseros, ahora quedan divididos por el portón, que está limitado superiormente por un spoiler.

El interior del nuevo A3 evolucionó notablemente. Se destaca el sistema multimedia MMI con una pantalla muy delgada que se repliega eléctricamente y queda completamente oculta dentro de la plancha. Además puede complementarse con el MMI touch incorporado al pulsador giratorio, con reconocimiento de caracteres.

Probamos la versión naftera con turbo e inyección directa TFSI de 1.8 litros con 180 CV de potencia, que confirma todo lo bueno que se le conoce a los propulsores de Audi. Acoplado a la caja de doble embrague S tronic de 7 velocidades, es sumamente elástico y dispone de potencia en todas las condiciones.

El comportamiento dinámico es irreprochable. Además, si está equipado con el Audi Drive Select, puede configurarse al A3 de acuerdo a si los gustos del conductor apuntan a incrementar el confort o las respuestas deportivas.

En días como en el que estuvimos en el Autódromo, se agradece la presencia de un completo equipamiento en seguridad donde interviene el Control Electrónico de Estabilidad y el diferencial de deslizamiento limitado. Lógicamente también cuenta con ABS, anclajes ISOFIX y 7 airbags.

A la espera de un test mas exhaustivo, las primeras impresiones parecen confirmar que el nuevo A3 logró superarse a sí mismo.

Notas relacionadas:
Audi Argentina comercializa al Nuevo A3